jueves, 5 de marzo de 2015

Sri Lanka - Arugam Bay, Tangalle y Galle

Para llegar a Arugam Bay, tuve que coger un autobús en Ella que me dejó en Siyanbalanduwa, allí un tuktuk me llevo a Pottuvil y andar 15 min hasta Arugam Bay, una vez allí cruzas el puente y un poco más adelante está en alojamiento por excelencia, el Beach Hut, un hostel alucinante, con casetas de madera construidas en los árboles, sombra, mesas y un ambientillo perfecto, y por supuesto a 20 metros del mar, nada más llegar me cautivó el sitio.




Y eso que mi primera actividad fue un desastre! busqué un tuktuk que me llevara a la reserva Kudumbigala a ver los cocodrilos gigantes que viven allí y una zona de elefantes, pero salió la mañana lluviosa y no vimos más que unos pavos reales, una pena porque me habría encantado.

De vuelta en el hostel me dijeron que al final no había sitio para esa noche, pero sí para las siguientes, así que fui buscando habitación por todos los hostales que había en la playa (alguno realmente romántico, lástima no ir bien acompañado porque habría sido una pasada, pero muyyyyy caro), al final encontré uno bien chulo para esa noche, y al día siguiente me pasé al primero, porque había hecho el plan de estar una noche en Arugam Bay, pero desde que llegué decidí estar lo máximo que podía permitirme (estaba acabando mi viaje) que eran tres noches.






Así que estuve esos tres días paseando por la playa, leyendo, bañándome en el mar a todas horas y comiendo platos de pescado recién pescado, bien relajado, haciendo balance del viaje, y bebiéndome una cerveza en la playa durante cada atardecer.... sufrimiento total para ir despidiendo el viaje!



Me quedaban dos noches y había pensado ir a Galle directamente, pero al final decidí hacer la primera en Tangalle y la segunda en Galle, y fue una buena decisión porque Tangalle me encantó, llegué por la mañana, encontré un hostel barato en la playa y me fui a dar un paseo, primero por el puerto y el pueblo, pero lo bueno llegó como no podía ser de otra manera en la playa por la tarde.

Es una playa larga, con una olas espectaculares, y con bastantes hostales en primera línea, por lo que había un ambientillo muy chulo de guiris bañándose, jugando al boley, y tomando algo en mesas desperdigadas por la playa. También había un grupo de gente pescando con una red gigante que habían metido por la mañana y que iban sacando hacia la orilla tirando por los dos extremos, unos diez o doce tios por cada lado tirando a muerte (en plan sogatira), y que si te unías te daban uno de los peces que sacaran... allí los dejé y la cosa tenía pinta de llevarles por lo menos un par de horas más.

El mar era tan fuerte que para que la gente se pudiera bañar tranquilamente, habían hecho como unos rompe olas de rocas gigantescos para hacer una zona trankila detrás, de todas formas lo divertido estaba donde las olas rompían formando unos tubos espectaculares, así que aproveché para darme un baño (que sería el último del viaje) mientras jugaba en unas olas de unos tres metros y dejaba que me dieran una paliza de volteretas. Cené un arroz en un restaurante de la playa, acompañado de mi última  Lion de tamaño estándar, y a dormir!



El viaje de Tangalle a Galle es una maravilla, bordeando una costa preciosa de un mar de colores turquesa y olas espectaculares, pude ver los famosos pescadores que están sobre un poste clavado en el fondo (que me parecieron más una atracción turística que otra cosa) y mucho ambiente surfero.



Una vez en Galle se reforzó mi idea sobre dejar que el viaje fluya.... se suponía que dentro del fuerte los alojamientos son demasiado caros, así que estuve buscando fuera, acabé en un par de sitios en el quinto pino, feos y más caros de lo que debían, así que cansado de todo decidí entrar en el fuerte, verlo durante el día y por la noche ya vería lo que hacía, total que a los cinco minutos de estar paseando por las calles, un abuelo me ofreció una habitación recién arreglada para los guiris, en su casa que acabó dejándomela por la mitad que me pedía al principio, justo en el medio del fuerte en una zona espectatular, así que tengo claro que hay que dejar que los viajes fluyan, no agobiarse ni enfadarse cuando se atasque algo, ser positivo y dejar que fluya.





Fort Galle, es uno de esos sitios donde parece que se ha parado el tiempo, un entramado de calles con edificios coloniales en perfecto estado (o mejor dicho completamente reformados en hoteles de lujo), tiendas de joyas o ropa, restaurantes, etc... uno de esos sitios totalmente turísticos pero que mantienen la esencia original y que hacen que te transportes durante todo el tiempo que pasas en ellos.







Estuve toda esa tarde y la mañana siguiente, paseando por las calles, entrando en las casa señoriales, alucinando con sus patios, iglesias y mezquitas, el faro y viendo un atardecer alucinógeno, regalo de despedida y último de tantos que pude disfrutar a lo largo del viaje, y disfrutando del ambientillo de gente de todo tipo que había por allí. Dar la vuelta al perímetro de la muralla es una pasada, mientras contemplas el mar y las olas, y te vas haciendo a la idea de la vuelta a casa....




















Y "por fín" la vuelta a casa.... los primeros días de un viaje largo te entran dudas de si será demasiado tiempo y si se me hará largo, dudas de este tipo, pero conforme van pasando los días, te aclimatas, tu cuerpo y mente se adaptan y vas pasando de un sitio increíble a otro todavía mejor, te vas dando cuenta de que una vez que sales de casa, la única razón para volver es el dinero y la familia, pero de no ser por eso, una vez que empiezas podrías dar la vuelta al mundo con una mochila, tres camisetas y dos pantalones, cada vez estás más relajado, disfrutando del viaje y de las personas que te vas encontrando, y cuando llega el día (o las dos últimas semanas) de volver a casa, te preguntas porque no cogiste el vuelo de vuelta quince días más tarde... jaja siempre igual!

En fín, en Galle empezó mi viaje de vuelta, nada más y nada menos que 55 horas que en principio veía como un marronazo pero que resultaron ser las justas para hacerme a la idea del fin de mi viaje y de la vuelta a casa. De Galle a Colombo en autobús (quería haber ido en tren pero me venía un poco justo llegar al aeropuerto), Colombo al aeropuerto, aeropuerto de Colombo al de Bombay, espera de  7 horas, de allí a Riyadh, espera de 14 horas, de allí a Jeddah, 1 hora, Madrid! del aeropuerto al centro y de allí a Zaragoza!!!

Hacía mucho que no decía esto, pero después de este viaje, los lugares tan bonitos que he visto, la gente que he conocido y lo que he disfrutado, no puedo despedirme de otra manera que diciendo:

La vida es maravillosa, be water my friend!!


Algunos de mis gastos:

Autobús Ella-Arugam Bay: 170 Rs
Tuktuk safari cocodrilos: 1.500 Rs
Hotel Arugam Bay #1: 1.000 Rs
Comida pescado: 1.100 Rs
Hotel Arugam Bay #2: 600 Rs/noche
Desayuno: 320 Rs
Birra: 350 Rs
Coka: 200 Rs
Autobús Pottuvil-Tangalle: 300 Rs
Hotel Tangalle: 1.000 Rs
Comida calle: 150 Rs
Cena playa: 750 Rs
Autobús Tangalle-Galle: 100 Rs
Hotel Galle: 1.000 Rs
Comida: 1.000 Rs
Desayuno: 300 Rs
Autobús Galle-Colombo: 270 Rs
Autobús Colombo-aeropuerto: 200 Rs